Te he amado...

sábado, 10 de enero de 2009

Durante muchos años te he amado,
con todas las fuerzas posibles de mi alma.
Sin darme cuenta que tu ausencia me había estancado
de una manera imposible de evitar.

Durante muchos años te tuve en mi corazón,
en mis sueños, en mi mente, en mis recuerdos,
me acostumbré y aprendí a ser feliz sin tí.
Edifiqué mi vida y construí un nuevo camino,
a veces te extrañé, a veces te olvidé,
pero no había dejado de sentirte.

No necesité tenerte presente, tomando mi mano,
besando mis labios, diciendo “te amo”.
No necesité de tus palabras ilusas
de tus encantos, de tus miradas,
no necesité nada, simplemente te amaba.

Sin embargo, hoy, mirando hacia atrás
no voy a mentirte, no me arrepiento
de haberte entregado tanto de mi vida,
después de todo tú también me has dado
más de lo que jamás imaginé…

Me enseñaste tantas cosas, sin querer,
de un valor incalculable,
amaste partes de mí que yo no conocía…
y dicen que todo termina,
pero yo creo que se transforma, pasa a otro lugar
cambia el formato pero no la esencia,
el amor es el amor, nada lo apaga.

Hoy, que me dí cuenta que haberte esperado me paralizó,
hoy, que me dí cuenta que no valía la pena que regresaras,
por que volver ya no hubiese sido igual,
ya no estaban presentes aquellos niños de ayer
que se amaban con locura, ilusión e incluso idealismo.

Y sirvió de mucho, ambos crecimos,
transformarnos nos volvió otros, nos volvió mejores.

Hoy puedo agradecerte, sin culpa ni rencor,
que hayas sido parte de mi pasado,
puedo agradecerte por que gracias a tí aprendí
el verdadero significado del amor,
gracias a tí sé que aún no es tarde,
que el amor no sse termina, sólo cambia de lugar,
gracias a que cerré esa puerta que nos unía,
me doy cuenta, hoy,
que puedo volver a comenzar.

María Eugenia.

A mí...

A mi… que no me importa el qué dirán de la gente, que no me sale dejar de soñar, que todo me produce emociones diferentes, que no sé dejar de gozar.

A mí, que la salsa me enamora, me agita y me devora, que no concibo la vida sin palmas, sin brillo, sin vueltas… sin más…

A mí, que todo lo que toco necesito sentir, que todo lo que adoro necesito vivir. A mí, que el miedo me paraliza y de vez en cuando vuelvo a intentar, que escapo de vez en cuando al silencio para ubicarme de nuevo en mi lugar. A mí, que trato siempre que puedo, de decirte la verdad.

A mí, Que una sola palabra puede hacerme llorar, que a veces me duele el pensar que te puedo llegar a lastimar.

A mí, que vivo acelerada en un mundo común y sencillo, pero que a veces sin querer lo vuelvo a complicar. Que guardo nostalgias, vivencias, eternos pasados que me hicieron madurar.

A mí, Que tengo en el alma amor para dar. Que tengo cariños difíciles de explicar.
A mí, que la histeria sabe envolverme con la velocidad de una estrella fugaz. A mí, que un beso me calma, me llena y me hace volar.

A mí, no intentes cambiarme, seguiré siendo igual, no me digas qué hacer, de vez en cuando me permito errar. Dejame decir lo que pienso, en cualquier momento y lugar, sé que soy diferente, es lo que me hace especial.

A mí, que me gusta que me sorprendas, que dejes que sea tal como soy, que me gustan las rosas, que me gusta abrazar, que me gusta sentir la lluvia bajo mis pies, y el sol en mi nariz.
A mí, que con cositas sencillas pero fuera de lo normal, me puedes enamorar, que de vez en cuando necesito un poco de paz, de tranquilidad, un poco de confianza para continuar.

A mí, que le temo a los límites, a que me frenes y no me dejes luchar.
A mí, que la vida me ha golpeado pero también me ha mimado, que a todo le doy un valor de más. Que me gusta hablarte de cosas trascendentes, que me gusta ayudar cuando alguien está mal. A mí, que más que nada en la tierra me gusta reír sin parar.

A mí, que Dios me hizo imperfecta, con manías que no sé si quiero cambiar, que de vez en cuando estoy triste, pero siempre intento ir por el camino que me da felicidad.

Aquí estoy, soy un ser más, puedes quererme, puedes odiarme, puedes dejarme pasar… yo sólo soy… un alma más

Miedo


Aunque calles, aunque no mires,
aunque todo parezca vacío y sin sentido.
Aunque las mañanas, las tardes y las noches
se vuelvan, de repente,
Un camino sinuoso, perdido y extinguido.

Aunque no haya más nada.
Aunque sólo quede el recuerdo,
Efímero, lejano, de lo que fue y de lo que pudo ser.
Aunque me haya consumido el miedo y te haya alejado de mí.
Aunque la oportunidad esté perdida aunque ya jamás vuelva a verte…

En la mirada que no te regalé, guardé mi miedo más profundo.
Y no quise darte más, por anteponerme a la realidad cotidiana,
Y tuve miedo.
Y no lo intenté.
Nunca supiste cómo, ni cuándo, ni por qué.

Pero no lo intenté.
Te enojaste y con razón.
Me callé y con razón.
Aunque siga mis sueños, mis ilusiones,
Nada de eso sucederá
Por que nada de eso intenté.
Jamás podrás comprenderme.
Jamás podré yo tampoco.

No lo puedo negar, es más fuerte que yo.


Decisión

Siempre hay alguien
Que se impone en el camino,
Que transforma tu destino,
Que te hace luchar por ti mismo,
Que te pone el límite entre el aire y el cielo
Y donde te preguntas si es mejor continuar o frenar.
La vida es corta, pero a veces parece eterna,
Momentos donde una pequeña decisión,
Puede modificar totalmente el rumbo,
Donde no se sabe bien si el que elige es el corazón o la razón.
Sé que te quiero pero
No puedo prometerte estrellas
Que no sé si soy capaz de alcanzar,
Pero puedo, por un momento darte esto que tengo,
Que es poco pero suficiente,
Para que puedas brillar, mi amor.
Y si hoy se me cae una lágrima no preguntes por qué.
Quizás no sea tristeza si no miedo,
Lo paralizante te puede envolver.
Y si no apuro el camino sé que no voy a llegar,
Sé lo que quiero pero no sé si estarás.